Todas las cosas tienen su
RITMO y muchas veces no está en nosotros el poder alterarlos. Al Día viene la Noche , al Verano el Otoño,
al Invierno la Primavera
y otra vez el Verano. A la
Gestación , el Nacimiento, el Crecimiento, la Niñez , la Adolescencia , la Madurez y la Muerte en este Mundo. A
CADA COSA LE LLEGA SU HORA.
En el Libro de ECLESIASTÉS (de la
BIBLIA ), Capítulo 3, Versículos 1 en adelante explica esas
secuencias de la Vida ,
en forma poética:
Para todo hay un TIEMPO SEÑALADO, aún un tiempo para todo asunto bajo los
Cielos: tiempo para Nacer y tiempo para Morir, tiempo para Sembrar y tiempo
para Cosechar. Y sigue hasta el Versículo 9 describiendo ejemplos. Te invito a
leerlos: te gustará.
A veces las cosas no siempre resultan como las Planeamos, o como las Deseamos y
se debe a que algo (o alguien) se interfiere en su desarrollo o resultado y sin
intervención tuya; o porque NO ES EL MOMENTO APROPIADO PARA ELLO. Incluso, si
Meditas en Estado Alpha para acelerar algo y así No Resulta, o se Demora, es
Inteligente de TU parte que NO TE ALTERES y discurras dónde está el detalle que
lo impide o frena. Pero si así tampoco resulta a TU agrado, MANTÉN LA CALMA y la Paciencia necesario para
Lograrlo, o al menos ENTENDERLO.
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