• Los enemigos más grandes y más peligrosos que puede tener un ser humano son las actitudes de prepotencia y de soberbia sin límites; si alguien puede darse cuenta de esta verdad, podrá ponerse a salvo con un simple ajuste de actitud volviendo de esta manera a la actitud sensata e inteligente donde se hacen las cosas con la debida sencillez y sabiduría con que deben hacerse siempre.
• Nuestro cuerpo es un maestro de última instancia y cuando no queremos ni aceptar ni darnos cuenta de que hay lecciones que tenemos que aprender necesariamente en esta vida, es el cuerpo con su maravillosa sabiduría que nos avisa y nos comunica el lugar exacto donde está nuestra falla o nuestro defecto.
• Los problemas de hígado o de vesícula tienen que ver con las conductas negativas de rabiar y renegar por el simple hecho de pensar que los demás no saben hacer las cosas y son unos cretinos, y conste que éste es sólo un pensamiento; sin embargo, este simple pensamiento tiene la virtud de hacernos renegar y de destrozarnos el hígado y otros órganos más.
• Cuando utilizamos la conciencia y decidimos revisar nuestras actitudes y nuestras reacciones, podemos efectuar ciertos arreglos en nuestros pensamientos y actuar más inteligentemente, sin ofender y sin causar daño a nadie con nuestras palabras y de esta manera habremos aprendido una lección maravillosa que nos dice que siempre podemos revisar nuestras actitudes si estamos dispuestos a ello, y también podemos realizar ajustes, aunque sean graduales, de nuestra actitud general para poder tener éxito en cualquier cosa que tengamos que comunicar o hacer.
• Cuando nuestra actitud está bloqueada en la armadura de la soberbia, lo que está pasando en realidad es que nuestra vista está siendo obstruida por esa armadura y no nos deja ver los peligros que están más adelante y los posibles errores que estemos cometiendo; por eso es bueno desear y querer adquirir el poder de la facilidad de decisión respecto a la capacidad de revisar constantemente nuestras actitudes generales en las cuales estamos viviendo y actuando.
• Quien adquiere el poder de observar en el espejo de la sinceridad su propia actitud, puede evitar cualquier peligro futuro que se presente en el camino de su vida y corregir cualquier error que esté cometiendo sin darse cuenta y ajustar su conducta y su actitud para lograr los resultados que con sinceridad desee obtener.
• Los problemas que tiene nuestro cuerpo nos muestran a través de la ley de correspondencia, los problemas que tenemos en nuestra mente y en nuestras maneras de pensar; si insistimos en ir contra la corriente, alguna enfermedad del cuerpo se encargará de ponernos en vereda hasta que la lección que tenemos que aprender sea aceptada y sea aprendida, bien aprendida, siempre y cuando nuestra actitud sea profunda y sincera.
• Ejercicio para ensayar su actividad creadora: "Aprecio y respeto a mi cuerpo físico profundamente".
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• Si desea tener una conversación con el autor o una consulta acerca de cualquier problema, llame a los teléfonos del encabezado (2488284 - 72513317), los problemas sólo se resuelven cuando se los afronta con seguridad.
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