viernes, 25 de noviembre de 2016

Reglas de Oro

Cuando estamos en la mesa, existen algunas pautas de comportamiento que debemos seguir si queremos demostrar nuestra buena educación y respeto hacia los demás.

Nuestros buenos modales deben estar presentes en todo momento, no debemos limitarnos a mostrarlos únicamente cuando estamos entre amigos o más aun en reuniones de tipo profesional, debemos lograr que se convierta en algo natural y que forme parte de nuestra vida cotidiana.

Estos son algunos consejos para evitar los errores más comunes que se cometen en la mesa y que jamás pasan desapercibidos.

• Para empezar a comer, se debe esperar la señal del anfitrión o la anfitriona.

• Cuando tomamos la servilleta para extenderla sobre nuestro regazo, no debemos sacudirla o hacer movimientos exagerados, nuestros movimientos deben ser discretos.

• Nunca debemos apoyar los codos en la mesa.

• Debemos adoptar una postura recta sin descansar la espalda en el respaldo de la silla.

• Cuando comemos, el alimento se lleva a la boca, no la boca al alimento, siempre mantener una postura erguida.

• Jamás se debe tocar ni tomar con las manos los alimentos que están en las fuentes.

• No está bien revolver la fuente buscando o escogiendo la mejor presa o la mayor porción.

• No se lleva a la boca nada directamente de la fuente, el alimento debe ser servido en nuestro plato para recién poder hacerlo.

• No debemos soplar los alimentos cuando están calientes, si es necesario se debe esperar a que enfríen por si solos.

• Cuando tomamos algún alimento de la fuente, no debemos llenar el plato como si fuera la última vez.

• No se debe colmar demasiado la cuchara o el tenedor.

• No tomar bocados demasiado grandes ni introducir otro sin haber antes pasado el anterior, además de dar una pésima impresión, corremos el riesgo de deformar el rostro.

• No es correcto mezclar los alimentos para comerlos, cada variedad se debe llevar a la boca por separado, ni siquiera las ensaladas.

• No debemos comer hasta la última migaja o gota de salsa.

• No hacer ruidos al masticar.

• No sorber la sopa ni las bebidas produciendo sonidos desagradables.

• No pretender pasar por gran conocedor haciendo demostraciones al beber el vino con gestos de sommelier, es molesto ver este tipo de actitudes.

• No beber echando la cabeza hacia atrás.

• Antes y después de beber debemos limpiar nuestros labios con la servilleta.

• No se dan muestras de impaciencia entre un plato y otro.

• Debemos seguir el ritmo de la comida, no es bueno exagerar con la conversación en lugar de comer, no olvidemos que el siguiente plato será servido una vez que todos hayan terminado.

• Si su alimento sabe mal, con toda discreción se devolverá el trozo en el interior de la servilleta procurando que pase desapercibido ante las demás personas, esto es algo que jamás debe ocurrir, la anfitriona tendrá tanto cuidado, que nunca se la pasará por alto un descuido de tal naturaleza.

• Cuando hemos terminado, no debemos apartar el plato vacío hacia los lados, se debe esperar a que sea retirado por el personal de servicio.

• Jamás debemos utilizar los molestos y desagradables palitos o mondadientes, debemos desecharlos de toda mesa y erradicar esa pésima costumbre.

• No peinarse ni arreglarse los cabellos en la mesa.

• No pintarse los labios ni retocarse el maquillaje.

• No limpiarse la nariz, es preferible excusarse y salir un momento si el caso así lo requiere.

• No se debe preguntar cómo fue preparado un plato.

• No se dan vuelta los platos para ver de qué marca son, ni se miran los vasos a trasluz.

• Apagar el celular antes de pasar a la mesa.

jueves, 17 de noviembre de 2016

Cáliz, fuste y etiqueta

Una creencia muy común es que cuando se toma vino blanco, la copa debe ser sostenida por el tallo (fuste, espiga), mientras que en el vino tinto, el cáliz debe hacerse reposar en la palma de la mano, con la espiga entre los dedos centrales.

Además que esta idea la vemos reforzada por lo que constantemente vemos en películas donde los actores, creyendo ser muy respetuosos de la etiqueta, lo hacen de este modo. La justificación que se da es que de esta manera, se le traspasa parte del calor de la mano al vino, pero bueno, no todo lo que se ve tan elegante y lleno de glamour en la pantalla grande es correcto, ni James Bond se salva...

¿POR DÓNDE DEBO SOSTENER MI COPA?

La copa nunca debe tomarse por el cáliz. En primer lugar, si el vino está servido a la temperatura correcta, no hay razón alguna para aumentar su temperatura, y más bien, puede ser contraproducente, además de ello, es de muy mal gusto manchar la copa con la grasa natural de nuestras manos, es para eso que las copas tienen el tallo o espiga… para tomarlas de allí.

José Rafael Arango, renombrado sommelier colombiano, dice que hay tres formas de tomar la copa:

• Quienes lo hacen de la base, entre los dedos índice y pulgar, son los “profesionales”.

Y es que evidentemente el pie o base de la copa está reservado únicamente para los expertos catadores, quienes a través de esta forma de sostener la copa, entre otras cosas, pueden hacer movimientos especiales y darle el impulso circular que requiere para liberar todos sus aroma y describirlo mejor.

• Quienes la toman por el tallo o espiga, son los “conocedores”.

Los dedos Índice y medio deben estar por enfrente del tallo, el pulgar, el anular y el menique por detrás del mismo, de esta forma logramos hacer contrapeso para que no se nos vaya a voltear la copa de vino, principalmente si somos principiantes.

• Quienes la toman del cuerpo o cáliz, son los “chicheros”.

La parte ancha o cáliz es el recipiente que contiene el líquido, pudiendo ser agua, vino, cava, champán, etc.

Si tomamos la copa por el cáliz o cuerpo, lo único que logramos es que el vino se caliente con el calor de nuestra mano además de dejar nuestras huellas y marcar toda la copa y esta, debe tener siempre un aspecto perfectamente transparente y prolijo además la única copa que se “abraza” es la copa de coñac o brandy que se cubre con la mano para templar y mantener tibio su contenido.

ALGUNAS RECOMENDACIONES

Antes de beber, debemos limpiarnos los labios con la servilleta para evitar dejar cualquier tipo de marca en la copa, como dije líneas arriba, la copa debe permanecer limpia y transparente.

Al terminar de beber debemos hacer lo propio, utilizar la servilleta para limpiarnos los labios.

Muchas personas piensan de manera equivocada que el dedo meñique se lo debe mantener paradito o fuera, piensan que es lo correcto o peor aún piensan que es una muestra de delicadeza y exquisitez, sin embargo, jamás debe estar parado cuando sostenemos una copa incluso tasas, vasos y cubiertos.

Si cae algo dentro de la copa la mejor opción es pedir que nos la retiren y la cambien por otra limpia. No sería correcto ponernos a “pescar” (con los dedos o con un cubierto) el “objeto” que ha caído dentro de la copa, a menos que sea un objeto de valor sentimental o económico como un anillo, una sortija y aun así, se lo deberá hacer en privado, nunca en frente de los demás.

Las copas, al igual que los cubiertos, jamás se deben compartir con otros comensales, dar de beber a otra persona de nuestra copa es poco apropiado.

Si hay un cambio de bebida lo correcto sería cambiar también de copa.

No es correcto trasvasar líquido de una copa a otra.

La regla de oro para saber qué tipo de vino va con cada tipo de comida es que, el vino no opaque el sabor de la comida, ni que esta haga que perdamos el paladar y los aromas del vino.

El maridaje puede ser por afinidad y por contraste o complementación y sin el ánimo de ingresar en el campo reservado exclusivamente para expertos sommeliers, me atrevo a decir que el mejor maridaje es cuando el plato y el vino casan perfectamente en nuestro paladar.

Por último, es de muy mal gusto sostener una conversación con una persona que se las da de experto conocedor de vinos y de estos hay muchos! estoy segura que la discreción y sencillez en las personas es más importante y un verdadero experto sabe dónde y cuándo hacerlo y, sobre todo, es muy capaz de demostrarlo si es necesario.

Efectos de la negatividad en nuestro organismo

Como bien sabemos, existen personas positivas y personas negativas en este mundo; las personas positivas influyen de manera benéfica y constructiva en las demás personas; en cambio, las personas negativas influyen de manera funesta en las personas que tienen la mala suerte de estar cerca de ellas.

Los efectos que producen las personas negativas con su presencia son siempre desagradables y se convierten en sensaciones de malestar y cuando se llega a casa producen inevitables y dolorosas peleas que no tendrían por qué ocurrir de no ser por la irradiación de energías de colores sucios y desagradables.

Como la importancia de nuestras imágenes mentales es vital, nuestras imágenes negativas que surgen por el solo hecho de pensar en esas personas, nos afectan, nos debilitan y nos producen un estado negativo o de depresión interna y es por eso que debemos evitar al máximo el contacto con dicho tipo de personas.

Existe un ejercicio mental con el cual se puede utilizar la imaginación para perdonar a esas personas y para neutralizar su influencia negativa; en este ejercicio mental creamos un conjunto de imágenes en las cuales las vamos perdonando una y otra vez y las vamos programando para que dejen de incomodarnos y esto se hace, visualizando en la misma imagen unas palabras que se le dice a la persona negativa para que deje de realizar su acción detestable o su acción manipuladora.

Un amigo sufría porque un pariente le invitaba a “farrear” casi cada fin de semana y eso le estaba trayendo muchos problemas en su hogar y lo peor, es que no podía decir que no y cuando hicimos la imagen mental en la cual perdonaba a su pariente que le daba invitaciones en forma de orden, agregamos algo a dicha imagen: mi amigo se imaginó diciéndole: “Te perdono por completo, pero quiero que me escuches con atención: voy a pedirte que no me invites más ni a tus fiestas ni a tu casa y que mantengas la relación buena conmigo”.

Después de hacer el ejercicio mental y de repetirlo unas cuantas veces, mi amigo se fue satisfecho entendiendo que había encontrado una solución en su mente y en sus imágenes mentales una escena de solución específica. Lo más extraordinario sucedió cuando en una ocasión le dijo a su pariente y a su esposa, en plena reunión familiar que les pedía y les informaba simultáneamente que ya no le inviten más a su casa ni a sus fiestas y agregó esto: “cuando me llaman por teléfono para invitarme me causan mucha perturbación y perturban la paz de mi hogar y por eso les pido que ya no me inviten y en esos términos nuestra relación va seguir siendo amistosa”.

Para sorpresa de mi amigo, la aceptación fue inmediata y bien recibida y de alguna manera, no han vuelto a llamar a su casa ni a molestarlo con sus invitaciones y cuando tienen que encontrarse en familia, lo hacen amablemente y la imagen mental de mi amigo ha producido la solución esperada y ahora toda esa familia vive mejor.

Si nuestras imágenes mentales son negativas y si no las modificamos, nos pueden producir más y más negatividad y es por eso que hay que actuar en el mundo de las imágenes y eso se aprende de alguien que sepa cómo hacerlo.

Para finalizar, debemos recordar que se puede imaginar o visualizar de forma deliberada cerrando los ojos y pronunciando palabras para crear escenas específicas que sean positivas y constructivas y verá cómo sus imágenes nuevas le producen positividad, sosiego y alivio.

¿Sabes pedir perdón?

Una de las frases más recurrentes en las parejas que tienen problemas en su relación es: “…nunca me pide perdón, ni reconoce sus errores. Se calla y espera a que se pase…”. ¿Es una buena estrategia? Seguramente quienes estén viviendo esta situación sepan, por experiencia propia, que se trata de un parche que se levantará de nuevo.

El tema del ‘perdón’ merece una reflexión un poco más profunda e ir más allá del “¿me perdonas? – claro”, y no haber dejado nada resuelto. Creo que con el tiempo, los pequeños reproches se pueden convertir en dinamita que puede hacer volar los cimientos de una relación. Entonces, ¿cómo pedir perdón si nos hemos dado cuenta que de forma consciente o inconsciente, hemos causado un daño a nuestra pareja?

Primero, tenemos que admitir que cometer errores y reconocerlo, lejos de ser una humillación o hacernos caer del pedestal en el que nos hemos colocado, es una forma de crecer, no solamente en madurez, sino a los ojos de la persona a la que amamos. Normalmente se salta a la defensiva con los clásicos “pues si era una broma, ¡cómo te pones!” o “¿me perdonas?”, de probada ineficacia.

Estaremos pidiendo perdón correctamente si lo hacemos de la siguiente manera:

• Describir las conductas que han podido provocar el daño

• Comprender los sentimientos de la persona dañada

• Proponer cambios para que no vuelva a ocurrir, no solamente promesas

• Generar la impresión de que estamos juntos en la tarea de crear la relación, no de imponerla o aguantarla

Un error que se suele cometer, generalmente en el entorno de las personas que han regañado entre sí, es pedir a la persona dañada – e incluso a veces exigir- que sea ella quien perdone. Muy pocos tienen la valentía de dirigirse a quien ofendió para exigir que presenten disculpas y por supuesto, cambios.

Por otro lado, se estará capacitado para perdonar cuando se pueda asumir lo ocurrido, aceptando la realidad como es, y entendiendo -que no justificando- lo ocurrido. No obstante, uno no tiene la obligación de perdonar cuando alguien le pide perdón. No tiene por qué volver a exponerse a un daño si no tiene la seguridad de que no va a volver a ocurrir, pues estaría siendo imprudente consigo mismo. Y esta decisión es libre y respetable.

En el caso de encontrarse ante un perdón elaborado, meditado, y reflexionado, se estará en mejores condiciones de poder admitirlo. Ambas partes deben entonces hacer el esfuerzo, por un lado, para introducir los cambios propuestos y por otro, para no volver a sacar el asunto una y otra vez, a modo de castigo permanente.

El perdón se encuentra en los cimientos de las buenas relaciones profundas y constructivas. Pero una vez más, hay que aprender a hacerlo correctamente y que suponga en nuestras vidas una experiencia de crecimiento.

martes, 15 de noviembre de 2016

6 técnicas para parecer aún más inteligente de lo que es

Existen diversas técnicas comprobadas a ciencia cierta, que ayudan de forma eficaz a difundir un aire de inteligencia y fascinar a los demás con sus habilidades y competencias. El diario británico ‘The Independent'’ ha recopilado seis puntos clave para dejar a todos boquiabiertos.

1. MIENTRAS HABLA NO TENGA UNA BEBIDA EN LA MANO

Las personas que durante una conversación tienen en las manos una bebida alcohólica son percibidas como menos inteligentes que aquellos que no lo hacen, según un estudio de las Universidades de Míchigan y Pensilvania (EE.UU.). En uno de los experimentos varios gerentes, tras ver las fotos y transcripciones de una hipotética cena de entrevista, percibieron a los candidatos que habían pedido bebidas alcohólicas, como menos inteligentes y aptos para los puestos.

2. PÓNGASE GAFAS

Según un estudio de la Universidad de Viena, los que llevan gafas, sin o con montura, son considerados más inteligentes, pero menos atractivos, que aquellos que no las usan.

3. HABLE DE FORMA EXPRESIVA

Aunque trate de ocultarlo, estas 9 señales delatan que usted es una persona inteligente “Si dos individuos pronuncian las mismas palabras, pero uno habla un poco más rápido y más alto, con menos pausas y una variación en volumen más grande, este interlocutor será considerado como más energético e inteligente y con más conocimientos”, según Leonard Mlodinow, autor estadounidense del libro ‘Subliminal: Cómo su mente inconsciente controla su comportamiento’.

4. CAMINE CON LA MISMA VELOCIDAD QUE LOS OTROS

Según una investigación de la Universidad de Boston, las personas, que andan con la misma velocidad que las demás, son percibidas como más inteligentes y competentes.

5. VÍSTASE DE FORMA MÁS ‘INTELIGENTE’

Hajo Adam y Adam Galinsky, científicos de la Universidad de Northwestern (Illinois, EE.UU.), sugieren que “la ropa que llevamos no solo tiene influencia sobre los demás, sino también sobre nosotros mismos”. Su estudio ha comprobado que aquellos vistos de batas blancas típicas para laboratorios, aciertan más en pruebas que requieren mucha concentración.

6. ADMITA LO QUE NO SABE

Según el efecto Dunning-Kruger, descubierto en 1999, las personas más competentes subestiman sus habilidades. Los autores del libro ‘Freakonomics’, Stephen Dubner y Stephen Levitt, aseguran que admitir lo que no sabe y prometer averiguarlo es algo que le puede hacer parecer más inteligente. Fuente: RT.

viernes, 11 de noviembre de 2016

Pintar para descubrirte

No necesitas de muchos elementos, alista una impresión con este símbolo, lápices de colores y deja fluir tu creatividad. +Vida te explica los motivos de una práctica que poco a poco se va convirtiendo en la favorita por sus poderosos efectos.

Brinda paz interior. Según Olivier Fradin, artista del Centro Amaya, los mandalas son obras estéticas que ayudan a quien practica la meditación o solo busca el equilibrio y paz interior. Atrae a las mujeres que están más conectadas a su sensibilidad que los hombres, afirma.

Calma el estrés y la ansiedad. Pintar mandalas se ha convertido en una especie de terapia porque te lleva a una búsqueda de armonía interior, además calma el estrés y la ansiedad. Asimismo, Fradin resalta que también se utiliza como apoyo para sanar enfermedades como el autismo y la esquizofrenia, porque activa ambos lados del cerebro.

Trabaja diferentes áreas. La terapeuta Verónica Lis, del centro Elementos de Bienestar, explica que los mandalas son símbolos sagrados que además de meditar, también funcionan para trabajar en el área de la salud o el amor incondicional. “No hay que ser un experto para pintarlas. Solo hay que concentrarse”, dice.

Diagnóstico. A través de estos dibujos uno se conecta con el subconsciente y de ahí en adelante, se pueden trabajar diferentes ámbitos, detalla. Con el pintado de colores se pueden identificar las áreas en las que existe el miedo, situaciones incómodas, problemas, etc. Una vez identificados estos puntos se trabaja en ello para abrir canales de energía y solucionar los problemas.

Sin presiones. Fradin resalta que pintarlas debe ser un placer. Es más, la regularidad es una clave para mejorar desde un punto de vista técnico como terapéutico. “Mientras más pintas, mayores son los beneficios”, afirma.

jueves, 10 de noviembre de 2016

¿Qué hay tras el Síndrome de Peter Pan y el Complejo de Wendy?

Más allá del popular cuento de Peter Pan, parece que pueden existir hombres que siguen siendo niños a pesar de su edad, y mujeres que actúan como madres, en lugar de ser esposas. ¿Hombres Peter Pan y mujeres Wendy? ¿Es posible?

Se denomina Síndrome de Peter Pan al conjunto de rasgos que reúne aquella persona que no sabe o no puede renunciar a ser hijo para ser padre. Se trata de un hombre-niño que se resiste a crecer, a madurar, lo que provoca que sea incapaz de cuidar, proteger o llevar hacia adelante una relación de pareja. Son hombres joviales, simpáticos, deportistas, “el alma de la fiesta”, seductores e inmaduros puesto que no han integrado cuál es la diferencia entre haber crecido y ser adultos.

En cuando al complejo de Wendy, se refiere a un modelo de mujer que, al no conseguir controlar su propia vida, hace esfuerzos por controlar la vida de su pareja a través de una actitud maternal. Sin embargo, es mucho menos frecuente que el síndrome de Peter Pan.

Para los “Peter Pan” actuales, el paso del tiempo también es ineludible y ellos tampoco pueden escapar. Aunque su comportamiento se asemeje más al de un adolescente; muy divertidos, con inmensas ganas de disfrutar de todos los aspectos de la vida, tras esa apariencia se halla un hombre muy inseguro, con un terrible miedo al rechazo y/o al abandono, lo cual, por tanto, también lleva hacia su área afectiva.

Aunque, aparentemente, es una persona muy segura de sí misma, en realidad, necesita afecto inyectado en grandes dosis por lo que se convierte en ciertamente dependiente emocionalmente de su pareja. Pero, ay! si ella insinúa la posibilidad de formalizar su relación porque, entonces, “Peter Pan” empezará a pensar; compromiso, responsabilidad ¡horror,crecer!…se asustará, se abrumará, y , es más que probable, que la pareja rompa, mejor dicho…que “Peter Pan”, vuele…Si, casualmente, su pareja es una” Wendy”…cada uno acabará volviendo a casa de sus respectivos padres.

Si a “Peter Pan” le va bien en la vida, puede seguir en dicho ciclo durante mucho tiempo pero no para siempre. Porque, como todos, llega un momento en que nos asentamos, miramos hacia atrás, valoramos y reflexionamos…y allí sufrirá una crisis

CÓMO SABER SI ERES UN “PETER PAN”

• Deseos de ser cuidadoso, mimado, que le den lo que pida, ya que piensa que su entorno está para satisfacer sus demandas, todas ellas, supuestamente, muy urgentes.

• Recibe, pide, critica pero nunca ama, da, elogia.

• No se puede comprometer, ni ve que tenga la obligación de cumplir una promesa.

• Sus necesidades básicas deben ser cubiertas por otra persona. Esa persona suele ser la pareja pero, también, puede ser la madre o una hermana.

CÓMO SABER SI ERES UNA “WENDY”

• Le gusta sentirse imprescindible.

• Evita constantemente que el otro se enfade y, si lo hace, siempre encuentra una excusa para su mal comportamiento.

• Le gusta, insiste en hacer todos, todos los recados de la familia.

• Cuando su pareja, su hijo, su padre, su hermano vienen del trabajo, de la escuela, les hace “psicoterapia” y “fisioterapia” en una misma sesión.

• Siempre te pide perdón, incluso, por cosas que no ha hecho.

CÓMO MEJORAR EL SÍNDROME DE PETER PAN Y DE WENDY

• Tolerar las frustaciones, sin victimismo, sin dramatizar.

• Preocuparse por el bienestar de los seres queridos.

• Aceptar los compromisos.

• Entender que cuando se toma una decisión, siempre implica una pérdida

• Entender que somos los responsables de nuestras emociones; los otros no son culpables de que estemos tristes, por ejemplo, nosotros estamos tristes.

• Las relaciones interpersonales deben ser recíprocas; no esperen lo que no están dispuestos a dar.

• No eres menos que el otro por darle las gracias por algo que ha hecho; al otro le hace sentirse valorado y tú, Peter Pan, y tú, Wendy, aprenderás a volar…

lunes, 7 de noviembre de 2016

Claves contra la “depre”



El tratamiento integral entre la psiquiatría y la psicología, junto con la fuerza de voluntad del paciente, son la clave para superar la depresión, que es considerada uno de los grandes males de este siglo.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 350 millones de personas sufren esta enfermedad y los expertos advierten que de no ser tratada a tiempo, puede convertirse en un serio problema, causando gran sufrimiento y alterando las actividades laborales, escolares y familiares de los afectados. En el peor de los casos, puede llevar al suicidio.

Depresión y tristeza

La psiquiatra Rocío Luján aclara a ECOS, en primer lugar, que la depresión es una enfermedad mental. Luego, dice que muchas personas piensan, equivocadamente, que las palabras ‘depresión’ y ‘tristeza’ son sinónimas.

En realidad, la tristeza es una reacción fisiológica que cualquier ser humano experimenta ante una situación de pérdida, una sensación pasajera. La depresión, en cambio, es un estado de tristeza crónico que se conserva durante mucho tiempo.

“Para diagnosticar una depresión tiene que haber un criterio de temporalidad, donde ese síntoma persista mínimamente por dos semanas. Antes, no se puede diagnosticar depresión porque sería muy precoz”, explica Luján.

En este tema, el psicólogo y neuropsicólogo Elías Alaka Robles, responsable del Gabinete de Neuropsicología, define a la depresión como el resultado de interacciones complejas entre factores sociales, psicológicos y biológicos. Los afectados por circunstancias vitales adversas como el desempleo, luto o traumatismos psicológicos, tienen más probabilidades de sufrir depresión. Esto, a su vez, puede generar más estrés, disfunción y empeorar la situación de la persona aquejada.

Estadísticas

En Bolivia no existen datos actuales sobre el número de casos de depresión atendidos por los profesionales de la salud mental.

El Informe sobre el Sistema de Salud Mental en Bolivia 2008 reporta que los principales trastornos atendidos en consulta ambulatoria son los del humor que representan, un 17 por ciento.

“Nuestra situación, sin embargo, no escapa a la situación mundial en el tema de salud mental. En países como el nuestro, a pesar de la prevalencia y la carga de los trastornos mentales, una gran proporción de personas que sufre estos problemas no recibe tratamiento ni atención”, dice Alaka.

Causas

Las causas de la depresión no siempre se hacen visibles de inmediato, por lo que este trastorno requiere de una evaluación y diagnóstico cuidadoso realizado por un profesional de la salud mental.

“En algunos casos las personas no tienen control sobre las circunstancias implicadas en la depresión, en otros esta se produce cuando no pueden ver que tienen opciones y pueden hacer cambios en sus vidas”, alerta el profesional consultado por ECOS.

Síntomas

Luján explica que la depresión se caracteriza por tener una serie de síntomas afectivos, motivacionales, cognitivos, físicos e interpersonales. Entre los afectivos están la sensación de tristeza crónica (durante gran parte del día), vacío, infelicidad, abatimiento y pesadumbre.

Los síntomas motivacionales se manifiestan con apatía y desgano; las personas despiertan cansadas pese a haber “descansado”. Los cognitivos se denotan con trastorno de memoria, fácil olvido de los recuerdos nuevos, alteraciones de concentración, atención y disturbios del pensamiento.

Los síntomas físicos se reflejan con trastornos del sueño, insomnio, fatiga, cansancio, disminución de la psicomotricidad, trastornos del apetito, que puede presentarse con falta de ganas de comer o con episodios de voracidad.

Mientras que los síntomas interpersonales se muestran con aislamiento: a la persona le irrita estar rodeada de otras, ya no le interesa cuidarse y descuida su aseo y autoimagen.

La manera de pensar del depresivo es muy peculiar y para los que están sanos resulta fácil criticarlo, incluso pueden identificar el problema generador de la enfermedad y encontrar múltiples soluciones, pero quien padece de depresión no ve soluciones por la distorsión cognitiva que le afecta. Suele tener pensamientos sobre generalizadores, catastróficos y se siente culpable de todo lo que pasa a su alrededor. “La depresión es una enfermedad muy discapacitante, uno ‘vive muerto’”, resume la especialista.

Desencadenantes y efectos

Los sentimientos de tristeza o desánimo son normales cuando una persona atraviesa determinadas experiencias penosas en la vida, como una enfermedad grave, la pérdida de un empleo, la muerte de un familiar o un divorcio. Sentimientos de dolor que tienden a ser menos intensos con el paso del tiempo.

La depresión se produce cuando esos sentimientos de profunda tristeza o desesperación persisten después de dos semanas o más, e interfieren con las acciones cotidianas de la vida como trabajar, comer o dormir.

De esta forma, la depresión puede convertirse en un serio problema de salud cuando se prolonga por mucho tiempo y tiene una intensidad que va de moderada a grave, causando sufrimiento y alterando las actividades laborales, escolares y familiares.

Así, las personas deprimidas tienden a sentirse indefensas, sin esperanzas y, no solo eso: también se culpan por tener estos sentimientos. Incluso pueden sentirse abrumadas y agotadas y dejar de participar en ciertas prácticas cotidianas, retrayéndose de familiares y amigos. En el peor de los casos, deriva en el suicidio.

Cada año se suicidan más de 800 mil personas en el mundo y esta es la segunda causa de muerte en el grupo etario de 15 a 29 años.

Tratamiento

Los sentimientos y preocupaciones que no se expresan, acompañados por una sensación de→ →aislamiento, pueden empeorar la depresión.

Lo cierto es que los deprimidos no reaccionan ni se sienten mejor espontáneamente, y si no buscan ayuda, sufren innecesariamente. Por eso es importante acudir a la atención médica profesional. Aunque, para tomar esta decisión, deben tener fuerza de voluntad, explica Elías Alaka.

Los tratamientos contra la depresión pueden ser muy eficaces cuando se recibe atención competente. Pero la realidad demuestra que más de la mitad de los afectados en todo el mundo no reciben tratamiento por falta de recursos económicos, de personal sanitario capacitado y por la estigmatización de los trastornos mentales.

“Existe todavía determinado estigma o renuencia asociado con buscar ayuda para los problemas emocionales y mentales, incluyendo la depresión. Lamentablemente, los sentimientos de depresión suelen considerarse como un signo de debilidad antes que una señal de algo que no está equilibrado”, comenta el profesional de la psicología y de la neuropsicología.

Según la psiquiatra Rocío Luján, el tratamiento contra la depresión tiene que ser integral: en la parte médica psiquiátrica, a través de la psicofarmacología, para que pueda regular el sistema neurotransmisor que se encuentra alterado, y en la parte terapéutica, que actúa sobre el manejo cognitivo y el control de las emociones.

En general, un tratamiento que solo toma en cuenta la parte terapéutica, es decir un psicólogo, tiene un alto riesgo de no ser resuelto. De igual forma, un depresivo tratado solo con medicamentos tiene altas probabilidades de terminar sin resultados favorables. “Es fundamental entender que esta enfermedad tiene una base biológica; si no se entiende la patología, se volverá crónica”, alerta Luján.

Comenta que en nuestro medio continúa la estigmatización del que acude al psiquiatra. La gente piensa: “yo no voy al psiquiatra porque no estoy loco”, sin darse cuenta de que se acude a esta especialidad para manejar los trastornos mentales.

El tratamiento de la depresión debe tener una duración mínima de un año. Bien tolerado por el deprimido y manejado por un especialista, no tiene mayores complicaciones, asegura la psiquiatra.

Casi todos los pacientes esperan una solución inmediata, pero deben aceptar que los medicamentos se consumen por bastante tiempo y, además, su efecto demora por lo menos 15 días. •

El deprimido y su entorno

La familia y amigos pueden alentar al ser deprimido a seguir el tratamiento y a poner en práctica las técnicas de afrontamiento y tácticas para la resolución de problemas que aprenderá mediante la psicoterapia.

Vivir con una persona deprimida suele ser muy difícil y estresante para los familiares y amigos. Ver su sufrimiento puede provocar sentimientos de indefensión y pérdida.

La terapia familiar o de pareja resulta beneficiosa para reunir a las personas afectadas por la depresión y ayudarlas a aprender formas eficaces de sobrellevarla juntos.

Medicación contra la depresión

Las medicinas son útiles para reducir los síntomas en los casos de depresión con una intensidad de moderada a grave.

Los médicos que tratan la depresión generalmente sugieren la combinación de psicoterapia y medicación.

Dados los efectos colaterales, el uso de medicación requiere un control atento por parte del médico.

Algunos deprimidos pueden necesitar psicoterapia antes que medicación, especialmente si su enfermedad no es grave.

Con una evaluación exhaustiva, un profesional de la salud mental puede recomendar un curso eficaz de tratamiento para la depresión del paciente.

Las perspectivas de una recuperación a largo plazo son muy buenas para quienes buscan ayuda profesional.

¿Hay formas de prevenirla?

PROGRAMAS. Está demostrado que los programas de prevención reducen la depresión. Entre las estrategias comunitarias eficaces para prevenirla están los programas escolares que promueven un modelo de pensamiento positivo entre niños y adolescentes.

PADRES. Las intervenciones dirigidas a los padres de niños con problemas de conducta pueden reducir los síntomas depresivos de los padres y mejorar los resultados de sus hijos.

EJERCICIO. Los programas de ejercicio para las personas mayores también pueden ser eficaces para prevenir la depresión.

Fuente: OMS

Mitos y verdades sobre la depresión

La tecnología y las nuevas investigaciones demuestran que la depresión es una enfermedad como cualquier otra. Pocas personas la superan por su cuenta, la mayoría necesitan tratamiento para volver a su rutina laboral y doméstica.

Mito. Los niños no pueden tener depresión.

Verdad. La depresión puede desarrollarse en cualquier grupo etario, étnico, económico y sexo.

Mito. La depresión solo ocurre cuando sucede algo malo, como un divorcio o la pérdida de un ser querido.

Verdad. Es evidente, pero también pueden desencadenarla otras cosas como, por ejemplo, los medicamentos, problemas hormonales, el parto, el uso de alcohol y drogas.

Mito. Si no puedes salir de la depresión, eres débil.

Verdad. La depresión es una enfermedad, un problema con la química del cerebro. Uno no puede superarla así, sin más. Esto sería como proponerse hacer desaparecer el asma o un ataque al corazón de un día para el otro.

Mito. Solo las personas muy deprimidas o las que piensan en suicidarse necesitan medicamentos.

Verdad. La mayoría de las personas con depresión necesitan medicamentos, ya que ellas pueden mejorar o eliminar los síntomas de la depresión.


sábado, 5 de noviembre de 2016

Autoconocimiento = Más felicidad

Autoconocernos nos hace más felices porque nos permite conectar con quien realmente somos y no con la idea de quien deberíamos ser”, explica a Efe el “coach” (orientador) Enrique Jurado, director de D’Arte Coaching.

Para iniciar el camino del autoconocimiento Jurado aconseja ser conscientes de que somos los arquitectos de nuestra vida, saber que somos milagros andantes y partes de una naturaleza preciosa y enorme, repleta de abundancia y posibilidades.

“Caminar todos los días una hora, meditar, comer con conciencia, escuchar, amarnos y comunicar con nosotros mismos, son acciones que nos van a ayudar a entendernos y elegir una vida más feliz”, de acuerdo a Jurado.

La inmensa mayoría de las personas coinciden en su deseo de que su vida sea lo más feliz posible, pero la coincidencia es mucho menor a la hora de proponer y elegir las recetas y caminos para hacer realidad ese deseo compartido de bienestar, e incluso para definir a la felicidad.

“La felicidad es una palabra, una etiqueta para describir un estado de bienestar, plenitud, satisfacción personal, una sensación de crecimiento, de sentirnos muy grandes y capaces, de algo que nos llena”, explica a Efe, Enrique Jurado, “coach” (orientador) y director de D’Arte Coaching, que imparte el “Máster en Felicidad y Evolución Personal”.

“La felicidad, a veces, se describe como una emoción de ilusión, entusiasmo y alegría y, para entenderla por contraste, sería lo contrario del miedo”, asegura y explica que este temor nos genera un vacío, nos acongoja, nos da la sensación de sentirnos pequeños, de no tener fuerzas, mientras que la felicidad nos da energía, ganas de movernos, crear, llegar a otras personas y conectarnos”, explica Jurado.

“Por eso las personas queremos felicidad, porque nos conecta con eso que realmente somos: seres creadores, a los que nos gusta movernos, experimentar y en definitiva, vivir”, enfatiza este “coach”.

“El avanzar y atravesar los peligros inventados es parte de nuestro aprendizaje en vida para generar una humanidad más amplia, más generosa, más amorosa, pues avanzar atravesando los miedos nos da también felicidad”, asegura Jurado.

Para este experto, una de las claves para ser feliz es el autoconocimiento pleno y la toma de conciencia personal acerca de la identidad, valores, necesidades, capacidad, recursos y habilidades de cada uno, lo cual puede -según afirma categórico- “transformar la vida de las personas”.

Adiós miedos, ¡hola felicidad!

“El autoconocimiento consiste en saber quiénes somos, pero en realidad lo que conocemos de nosotros mismos simplemente son comportamientos, formas de ser, emociones y sensaciones, pero nunca nos hemos parado a apreciarlas de verdad”, señala.

Jurado hace hincapié en la necesidad de ir más allá y entender el porqué y el para qué están ahí esas formas de ser, comportarnos o sentirnos; también cómo las hemos producido, cómo se han formado, de dónde nos vienen y cuáles han sido los patrones que las han conformado.

Para este experto, “somos los directores de nuestra película, no meros actores que miramos hacia el guionista o al director, e indirectamente somos responsables de lo que estamos atrayendo, del foco que ponemos en esta película”, e invita a preguntarse: ¿Acaso sabemos qué tipo de película queremos hacer?.

“Autoconocernos nos hace más felices porque nos permite conectar con quien realmente somos, y no con la idea de quién deberíamos ser que tenemos en la cabeza”, indica Jurado.

“A veces pensamos que “somos” nuestros pensamientos derrotistas, nuestros comportamientos tristes, inmovilistas y apesadumbrados, nuestros valores de inmovilidad, nuestras creencias sobre lo horroroso y difícil que es nuestra situación”, comenta.

Pero según Jurado, el ser humano realmente tiene en sus genes todo lo necesario para ser feliz y está hecho “para hermanarnos unos con otros, para ir en un manada que se desarrolle y que genere espacios de crecimiento”.

“Si realmente pudiésemos eliminar la barrera que nos impide ver quiénes somos, es decir, eliminar los miedos, seríamos capaces de conectar con la vida pura que realmente somos y eso está enganchado directamente con la sensación de plenitud, desarrollo, ilusión, alegría y felicidad”, sentencia.

“Imagine una persona en situación de desempleo y que está quejosa, sin energía, dándole vueltas a la cabeza sin encontrar soluciones, y sin tener posibilidades aparentes, que espera que otras personas le ayuden”, señala Jurado.

“En lugar de eso, esa persona puede trabajarse esos miedos, esas creencias, sabiendo que realmente no son suyas, que son simplemente una respuesta casi automática aprendida del pasado y que es capaz de cambiar esa respuesta automática por una respuesta mucho más adecuada, mucho más valorizable que le genere de nuevo esa conexión”, propone.

Jurado resalta la importancia de conocerse a sí mismo para ser feliz, aunque admite que este cambio es difícil y no se produce de la noche a la mañana. Para ayudar a conseguir este objetivo, aporta estas recomendaciones y claves:

1. Razones. “Para empezar a generar ese autoconocimiento tenemos que utilizar nuestras capacidades cognitivas, nuestra forma de pensar, sabiendo que todos nuestros miedos, sentimientos y emociones automáticas no son verdad, sino simples resoluciones de una forma de pensar concreta, programada por experiencias aprendidas del pasado”, indica.

2. Observa tus pensamientos. “Simplemente sea testigo de sus pensamientos, emociones y resultados”, recomienda.

3. Deja de enjuiciarte. Para Enrique Jurado es el paso más complejo, ya que no estamos acostumbrados, y los juicios nos salen automáticamente, pero si practicamos podremos llegar a ser meros observadores.

4. Sustituye pensamientos. Una vez observados cuáles son los pensamientos que nos hacen mal, este orientador recomienda buscar otros alternativos y usarlos para observar su impacto y tomar una decisión al respecto de su uso.

5. Actos cotidianos que ayudan. “Caminar todos los días una hora, meditar, comer con conciencia, escuchar, amarnos, y comunicar con nosotros mismos, son acciones que nos van a ayudar a entendernos, conocernos, y finalmente elegir una vida más feliz”, de acuerdo a Jurado.

6. Algunas preguntas clave: ¿Quién soy?, ¿para qué estoy aquí?, ¿cuál es mi camino?, ¿qué hago para mejorar mi vida? ¿Qué puedo hacer para sentirme mejor? ¿Qué áreas de mi vida puedo mejorar? ¿Me conozco lo suficiente? ¿Se lo que quiero?.

7. El primer paso. Para iniciar el camino del autoconocimiento Jurado aconseja hacernos conscientes de que somos los arquitectos de nuestra vida, saber que somos milagros andantes y que somos partes de una naturaleza preciosa y enorme, repleta de abundancia y posibilidades.

8. Felicidad en vez de temor. En lugar enfocarnos en nuestros miedos y agrandarlos, Jurado sugiere que reconozcamos y eliminemos esas creaciones mentirosas, fantasmas interiores y monstruos de papel, y nos conectemos a la felicidad que supone estar vivos y observar nuestras capacidades y corazón.

¡Cómete el mundo! 5 beneficios de viajar sola




Ir nos de viaje sin compañía, para descansar y desconectar de las preocupaciones cotidianas, es un plan alternativo que pocas veces nos planteamos, quizás por la costumbre de viajar en familia o con amigos. A veces perdemos la oportunidad para reencontramos con nosotros mismos, enfrentar nuestros miedos y evaluar nuestro proyecto de vida. Te explicamos los beneficios de emprender la aventura en solitario

Cierra los ojos e imagina que estás en una playa de arena blanca, frente a las aguas turquesas del mar, contigo mismo como única compañía. A tu alrededor hay grupos de gente conversando, riendo y cantando, parejas tomadas de la mano, o familias construyendo castillos de arena con sus niños. ¿Cómo te sentirías si estuvieras en esa situación? ¿Te sentirías extraño, inseguro o juzgado por estar solo?

Según explica la psicóloga Julia Vidal, experta en ansiedad y estrés, y directora del gabinete de psicología “Área Humana”, “algunas personas ponen mucha atención en imaginar qué dirán los demás si los vieran solos o solas”, y por eso, se frenan a la hora de hacer realidad sus planes.

“Van a pensar que soy rara, que no me quieren, que no tengo amigos” son algunas de las ideas que se repiten en la mente antes del viaje, y una vez allí, emociones como el anhelo de compañía, la incomodidad o la soledad pueden aparecer.

Para la especialista, el éxito o fracaso de viajar solo, depende del momento y de las condiciones en las que hemos tomado la decisión. “No es lo mismo que sea una elección propia, a que haya sido porque no tenemos a nadie con quien viajar”, añade Vidal, y por eso, debemos aterrizar nuestras expectativas antes del viaje.

Beneficios de viajar sola:

Aprender a estar contigo mismo. Parece que estamos acostumbrados a vivir rodeados de gente y a huir de la soledad. Sin embargo, desde la individualidad, “podemos aprender a estar con nosotros mismos, a conocernos más, a saber qué queremos lograr y qué opciones tenemos para conseguirlo”, asegura la psicóloga.

Además, explica que cuando viajamos solos, es más fácil que percibamos cómo nos sentimos frente a diferentes situaciones, y enfrentarnos a ciertas emociones que normalmente evitamos, y que tienen el poder para convertir nuestras debilidades en fortalezas.

Enfrentar los miedos y ganar seguridad. Vidal explica que el temor a “no ser capaces” aparece desde el primer momento en que pensamos en viajar solos. Posiblemente porque siempre hemos tenido a alguien que nos guíe y nos acompañe en nuestro camino.

De ahí que, emprender este viaje es una buena oportunidad para defendernos solos a la hora de practicar nuestros conocimientos de un idioma extranjero, y potenciar nuestra capacidad para orientarnos en el lugar de destino.

Aprender a disfrutar del silencio. “Tómate unas vacaciones sin compañía, como un turista anónimo, quédate a solas con tu persona, habla menos, busca el silencio, regodéate de tu ser”, afirma Walter Riso en su “Guía práctica para vencer la dependencia emocional”.

Y es que cuando viajamos solos nos vemos obligados a permanecer más tiempo en silencio, y con esto, a abrir un dialogo con nosotros mismos, para reflexionar con mayor distancia sobre los problemas que nos aquejan.

Desarrollar habilidades sociales. Según la psicóloga, “combinar la experiencia de viajar solo, con la oportunidad de conocer a otras personas es un buen complemento”.

Es por ello que Vidal recomienda “estar abiertos a nuevas experiencias y a abrir conversaciones con las personas que nos rodean”, y para lograrlo aconseja participar en la planificación de actividades dentro de los grupos de las excursiones, porque esto facilita la integración con los demás.

Tiempo para cuidarnos. Cuando viajamos en compañía de nuestros amigos o familiares es frecuente que pensemos menos en nosotros mismos y más en las prioridades del grupo. Pero un viaje a solas puede ser la mejor excusa para escuchar tu mente y tu cuerpo, en un lugar donde puedas meditar y relajarte.

También es la oportunidad para darte gusto, comer saludable, ir a una sesión de masaje en el spa, o darte tu misma un masaje de pies con las piedras del mar.

El único riesgo que corres al hacer un viaje sola, es que te falten horas para disfrutar de la soledad, y por eso, decidas repetirlo.

viernes, 4 de noviembre de 2016

Poder mágico en el pensamiento

Piense en un deseo, piense en algo que usted necesita y desea que suceda, visualice una escena en la que su deseo está sucediendo, tómese unos instantes, cierre los ojos e imagine esa escena real o representativa, sienta alegría mientras imagina y sepa que puede

repetir ese ejercicio en cada momento en que pueda hacerlo y si persiste y persevera, su deseo, de alguna manera se realizará.

A un amigo que veía como muy negativo y viviendo en un mundo exclusivamente material le pregunté si creía en esta función de la mente, la función de atraer y de propiciar actos y encuentros que podrían beneficiarnos y beneficiar a la otra persona y me dijo que en algún tiempo lo había intentado y como no pasaba nada había dejado de creer en ello y le

pregunté acerca de cuántos de sus pensamientos los dedica a los demás para crear el equilibrio necesario de su proceso pensante y me miró extrañado como diciendo ¿de qué me estás hablando? Le expliqué que cuando nuestra mente está en desequilibrio pensante, no produce coincidencias ni atracciones positivas y tal como estaba intuyendo, mi amigo solo pensaba en sí mismo todo el tiempo.

Le expliqué que todos emitimos energía pensante todo el tiempo y que cuando en algunos momentos enviamos pensamientos positivos de cualquier naturaleza a los demás, se establece y se crea el equilibrio necesario para poder poner en acción a nuestro poder de atracción y a nuestro poder creador.

Como mi amigo nunca había oído nada al respecto, no tenía idea de que se podría pensar algo así de cuando en cuando: “Envío pensamientos de alegría a todos los seres y a todas las personas de este mundo” o “envío pensamientos de salud a todas las personas de este mundo” o “Que todas las personas atribuladas por grandes problemas reciban asistencia de la mente universal y que sus problemas sean divinamente resueltos”.

Usted mi querido amigo o usted mi querida amiga puede hacerlo desde este mismo momento y puede ensayar a enviar esta clase de pensamientos que son proyectados desde su mente hacia todas las personas o entidades a las que usted quiera ayudar o beneficiar con sus pensamientos benéficos y amorosos que decida emitir.

Está práctica es interesante y realmente necesaria para crear el equilibrio imprescindible para que los poderes de nuestra mente se pongan en acción.

Como las actividades que se repiten se vuelven hábitos, tome la decisión de escribir cualquier pensamiento amoroso o constructivo que se le ocurra y repítalo cinco veces contando con los dedos de la mano y el equilibrio tan necesario llegará a su vida, a su hogar y a sus asuntos.

Afirmación para acelerar la propia recuperación: “Envío pensamientos de salud y de sanación feliz a todas las personas de este mundo” (escribir cien veces).

miércoles, 2 de noviembre de 2016

Camine como alguien feliz y será más feliz, dice una investigación



Una investigación publicada en el Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry afirma que para sentirse feliz, basta simplemente caminar como una persona alegre.

Durante el experimento, se pusieron a prueba un número de personas para ver si 'brotar' el pecho y balancear los brazos realmente trae más felicidad que andar cabizbajo y lento. En el estudio, un grupo de personas tuvo que caminar durante 15 minutos en una cinta mientras se analizaron algunos factores, explica el portal de la revista Galileu.

Los participantes fueron seguidos por las cámaras con sensores de movimiento. Frente a ellos una pantalla mostraba las acciones en un medidor que se movía a la izquierda al caminar "deprimido" y a la derecha cuando "feliz"

A medida que pasaban los minutos, el equipo de investigación pidió a las personas que traten de dirigir el medidor a la izquierda o a la derecha. Pero antes de comenzar la prueba física, ellos tenían que leer una lista de palabras positivas y negativas.
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Después de la caminata, los participantes tenían que escribir las palabras que recordaban. Los resultados mostraron que aquellos que caminaban de manera más triste (siguiendo la lógica de otro estudio ) podría recordar las palabras más tristes; y los que caminaba felizmente se acordaban de las palabras más positivas.

Para los investigadores, esta lógica es en la línea de otros trabajos publicados sobre el tema. De acuerdo a esas investigaciones, caminar como un líder puede aumentar las posibilidades de convertirse en un cabecilla; y sostener un bolígrafo con los labios puede aumentar el impulso a sonreír. Entonces, no cuesta nada caminar más 'animado' allí, por ahí se contagia.

martes, 1 de noviembre de 2016

Viviendo desde el amor o desde el miedo

En la vida sólo tenemos dos opciones, o vivimos desde el amor o lo hacemos desde el miedo. Y aunque parezca absurdo, la mayoría de las personas eligen vivir bajo la influencia negativa del miedo y no bajo el amor.

Las mujeres tienen miedo a enamorarse de alguien, tienen miedo de salir con alguien desconocido para ellas, de embarazarse y por eso desconfían de todo el mundo, porque tienen miedo a equivocarse nuevamente y volver a sufrir; las mujeres que viven bajo la influencia del miedo, creen que todos los hombres son mentirosos e infieles, sienten que nadie las quiere, que ellas no nacieron para el amor y por eso niegan la existencia del mismo, diciendo "ya no creo en el amor" o "el amor verdadero no existe", y que los hombres no sirven para nada, porque todos son mentirosos, etc.

Los hombres, al igual que las mujeres, han elegido vivir bajo la influencia del miedo, en vez de querer vivir bajo los efectos del amor; los hombres tienen miedo a comprometerse en una relación seria con una mujer, tienen miedo al matrimonio, a que su chica se embarace por el temor que involucra la alta responsabilidad de criar y educar a su retoño. Los hombres de hoy le tienen miedo a hablar con una mujer desconocida y hermosa, por temor a ser rechazados.

Vivir bajo la influencia del miedo es tan devastador para una persona como lo es la explosión de una bomba atómica, su autoestima es baja, el nivel de desconfianza e inseguridad se incrementa y eso hace que viva expectante del y ese sentimiento le impide ser feliz porque siente que no está preparada para amar, ni en condiciones de enamorarse de alguien, porque ven a las personas como una amenaza constante para su integridad física, emocional y sentimental.

Las personas que viven bajo la influencia del miedo sólo piensan en el dolor, el engaño y la traición, porque su vida entera gira en torno al temor de volver a fracasar, esto les impide pensar en el éxito y en la felicidad, no les permite pensar con claridad ni vivir con tranquilidad, lo que no sucede cuando una persona vive bajo la influencia del amor, ya que esta actitud le permite ver el mundo y a las personas desde otra perspectiva, ve la vida y la enfrenta con una actitud mental positiva, no siente miedo sino amor por lo que ve y lo que hace. Las personas que viven bajo la influencia del amor son tranquilas, pacificas, confiadas, alegres, entusiastas, no le temen al amor ni sienten miedo a enamorarse una y otra vez, porque los frutos del amor son la felicidad, la paz, la tranquilidad, la mansedumbre, la confianza, el perdón, la aceptación del otro a pesar de sus diferencias.

Una persona que vive bajo la influencia del amor encara la vida con una actitud mental positiva, lo cual siempre la conducirá a los caminos del éxito y como consecuencia de esto obtendrá la plena felicidad.

La inseguridad que nos produce el miedo nos quita el sueño, la paz y la felicidad, al tiempo que nos invade el temor y esto hace que la persona se sienta cobarde y los cobardes, inseguros, desconfiados y pesimistas jamás podrán saborear los frutos de la felicidad, porque no pueden vivir en libertad para amar y disfrutar de la vida.

El éxito y la felicidad son el premio que reciben las personas valientes y positivas que no le temen a nada, porque en cada expresión de la vida ven una maravillosa oportunidad para disfrutar de la paz y la felicidad, le ponen amor a su vida y a las cosas que hacen, que dicen y que ven.

Si aún sueñas con la felicidad al lado de un hombre o una mujer, abandona tu miedo para ver a esa persona como una valiosa oportunidad para ser feliz en la vida y disfrutar del amor al lado de él o de ella.