Ciertos componentes del semen pueden funcionar potencialmente como antidepresivos, como la oxitocina -llamada la molécula del amor y considerada afrodisiaca- que es esencial para la estabilidad emocional del cerebro y ayuda a combatir la ansiedad, el estrés, las fobias y los miedos, según un estudio llevado a cabo en Estados Unidos.
También se encuentran otras sustancias, en su mayoría hormonas, que aumentan la sensación de afecto entre dos personas y mejoran el ánimo y el sueño.
Gordon Gallup, psicólogo de la Universidad Estatal de Nueva York, lideró un estudio con 293 alumnas en el que descubrió que el semen puede ser el secreto de la felicidad. Logró demostrar que las mujeres expuestas directamente al semen estaban menos deprimidas, pues las hormonas presentes en el semen que son absorbidas a través de la vagina pueden variar el estado de ánimo de una mujer.
También se determinó que los intentos de suicidio son más comunes entre las mujeres que siempre usaron condones, en comparación con aquellas que no lo hicieron.
Durante el estudio ¿Tiene el semen propiedades antidepresivas? se evaluó la frecuencia del uso del condón y el nivel de felicidad de las mujeres a través del Inventario de Depresión de Beck, un cuestionario que evalúa el estado de ánimo.
Las personas que tienen más de 17 son consideradas moderadamente deprimidas. Entre los resultados se encontró que las mujeres que no usaban condones obtuvieron ocho puntos. Aquellas que lo hacían de vez en cuando tuvieron 10,5 y quienes siempre lo utilizan llegaron a los 15. Por su parte, las mujeres que no estaban sexualmente activas tuvieron 13,5 puntos.
Se sabe que el semen es 30 veces más eficaz que la vitamina E y puede retrasar el proceso de envejecimiento de las células en un 20%. También se le atribuyen propiedades antidepresivas y es el ingrediente principal de libros de recetas de cocina y coctelería.
El semen, que es producido por dos glándulas -la próstata y la vesícula seminal- no sólo contiene espermatozoides y el alimento para éstos, sino que está compuesto por proteínas, carbohidratos, grasas, aminoácidos, fructuosa, hormonas, vitaminas, antioxidantes y lípidos.
Sin embargo, según explica Fernando Vásquez, andrólogo y médico especialista en fertilidad, diferentes virus y bacterias pueden contaminar este fluido.
“La función única que le interesa al semen es transmitir la vida. El resto de cosas que se digan son conjeturas, pues todavía no es una sustancia medicada”, opina el especialista.
También es considerado un importante ingrediente para la estética facial. A partir del semen, el laboratorio noruego Skinscience creó y patentó un ingrediente para distintas cremas llamado Espermina. En su página web exponen que es más eficaz que la vitamina E y retrasa el proceso de envejecimiento.
Otros usos
¿Especulación? Científicos, artistas y gente común se han dedicado a encontrar los usos y beneficios del semen, distintos a su función biológica de transportar espermatozoides.
Piel Hay un suero que estimula el proceso de renovación de la piel, una crema limpiadora que exfolia las células muertas de la piel, una mascarilla reafirmante y ampolletas que prometen la restauración de la piel y el equilibrio del pH. Todos contienen semen.
Spa Según la revista Cosmopolitan, algunas mujeres gastan hasta 250 dólares por una espermina facial.
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