miércoles, 12 de septiembre de 2012

“Avalanchas sonoras y sus abusos”

* Existen grupos musicales que actúan en nuestros tiempos y que no se dan cuenta del daño que causan a las personas con una excesiva cantidad de volumen y de decibelios que imprimen a sus equipos pensando que con esto exhiben calidad sin darse cuenta del daño auditivo que van causando a los demás y que eso genera karma, consecuencias en la ley de causa y efecto que genera a su vez serios problemas en el hogar de los causantes de dichos abusos.

* Como todo desequilibrio y todo abuso que hacemos a los demás nos retorna y afecta a los seres que amamos, resulta interesante saber y recordar que todo lo que nos sucede en la vida y en nuestra realidad personal y familiar tiene una causa exacta que cuando la pensamos y admitimos, podemos hacer algunos ajustes y cambios y ver si es cierto lo que afirmo: todo desequilibrio y todo abuso que hacemos a los demás nos retorna y se manifiesta en la pantalla de nuestro cuerpo y de nuestra salud y también en la pantalla de nuestros resultados, por lo tanto, si estamos haciendo algo así, veamos la forma de hacer algo para que el desequilibrio o el abuso dejen de producirse y los efectos negativos que llegaban a nuestra persona y a nuestro hogar desaparecerán también.

* Un conocido que trabaja en un conjunto al que le estaba enseñando algunas habilidades le sugerí que fuera a hacerse una revisión y medición de su audición donde un otorrino y grande fue su sorpresa cuando descubrió porcentajes elevados de disminución de su audición normal; él no se había dado cuenta de la disminución de su audición porque cuando trabajaba las cervezas le llovían y de hecho sigue trabajando pero el sonidista de su conjunto descubrió también que ya tiene algún nivel de sordera y aún así sigue dándole todo el volumen al equipo de sus componentes.

* Nuestra audición no sólo es un sentido con el que oímos si no que es responsable de nuestro equilibrio; las personas que pierden la audición saben lo terrible que es tener un problema de esta naturaleza por eso es necesario que aprendamos a tomar decisiones firmes cuando estemos en presencia de avalanchas o de abusos sonoros que deberían estar normados por la autoridad competente.

* De todas formas, como la naturaleza es sabia, las personas que abusan lastimando el sentido del oído de los demás, como van sembrando esos daños, igual los irán cosechando en su momento y en su propia oportunidad; sin embargo, si alguien se hace consciente de este hecho, encuentre un modo y una manera de hacer las cosas más moderadas y de respetar el cuerpo y la salud de los demás.

* La herramienta de poder personal que hoy estamos aprendiendo se llama: “el poder de decisión”.

* Imagine una situación en la que se ve inmerso en una avalancha sonora o en un abuso sonoro; cierre los ojos y pregunte a su subconsciente: ¿qué decisión tendría que tomar para evitar a toda costa en el futuro toda avalancha sonora, todo abuso sonoro que lastime mi cuerpo y ofenda a mi alma?.

* Siempre con los ojos cerrados espere la respuesta de su subconsciente y luego pregúntese: ¿cuál es la lección que tengo que aprender en esta situación?

* La siguiente pregunta que debe hacerle a su subconsciente es la siguiente: ¿qué comportamiento debo ejecutar en la siguiente ocasión y qué comportamiento debo dejar de hacer? y luego de esperar unos instantes hasta que llegue su respuesta proceda con esta pregunta: ¿cuál es el beneficio de estos conocimientos que estoy adquiriendo de mí mente subconsciente? y una vez que llegue su respuesta, repase todo el proceso, tome su decisión de lo que hará en el futuro y luego prosiga con su vida normal; nos vemos en el artículo de mañana.

* Afirmación para escribir toda una hoja: “Tengo derecho a rechazar todo acontecimiento en que se produzca una avalancha sonora o un abuso sonoro detestable”.

* Nota importante: Los programas de cambio y mejoramiento de las conductas de treinta días producen personas positivas y sensatas capaces de responsabilizarse de sus vidas y de sus estudios.

* Si desea tener una conversación con el autor o una consulta acerca de cualquier problema, llame a los teléfonos del encabezado desde las 8.30 de la mañana (2488284 – 72513317), los problemas sólo se resuelven cuando se los afronta con seguridad.

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