Cuando la soledad es necesaria

Aveces se hace necesario e importante pasar un tiempo consigo mismo. Esto dependerá de las necesidades de cada persona, además que no existen parámetros que indiquen cuántas horas debe una persona compartir o no con otras. Según la sicóloga clínica educativa, Martha Heredia, hay personas que tienen una vida plena en la que disfrutan de una variedad de actividades en soledad, y otras personas que prefieren más estar en grupo.

Objetivos de estar solo. Cada persona decide qué le gustaría hacer en su momento de soledad. De acuerdo a la edad este tiempo de soledad, indica Heredia, cumple diferentes objetivos. En una adolescente podrá ser utilizado para escribir su diario, el varón no escribe un diario pero algunos escriben poesías, o les gusta investigar; adolescentes varones o mujeres aprovechan la soledad para escuchar música, tocar un instrumento musical, ordenar sus cosas en su habitación, hacer tareas, etc. En las personas adultas este momento puede ser muy valioso para ordenar ideas, o para disfrutar de algo que le gusta, como escuchar música, hacer ejercicios, caminar, disfrutar de un programa de Tv, una película etc.

Recargar el yo. En ese sentido, no hay nada egoísta en analizar de vez en cuando en nuestras propias necesidades, en pararnos a pensar sobre lo que hicimos, lo que realizamos, y los planes que tenemos. Nuestro Yo necesita recargar las pilas. De esta manera, separarnos del grupo, nos ayuda a ver las cosas con perspectiva, y a tomar una posición propia sobre muchos asuntos, sin dejarnos llevar por opiniones de terceros.

Las personas dependientes. Las personas que no pueden estar solas, que no han aprendido a disfrutar de la soledad, son aquellas que desarrollan relaciones de dependencia, donde tratan de manipular a otras personas para que las acompañen, o se convierten en acompañadoras permanentes, coartando la libertad, tornándose en personas de las que las demás terminan apartándose, acotó la especialista.